Cada vez que nos sentimos profundamente bendecidos por nuestra buena fortuna, por nuestro éxito o por la bondad de los demás, este es un buen momento para ofrecer una oración de gratitud a Dios, ya que el entendimiento cristiano es que todas las cosas buenas finalmente llegan de Dios. En realidad, tales bendiciones nos rodean todo el tiempo, y detenerse para expresar nuestro agradecimiento a Dios es una buena manera de recordarnos a nosotros mismos cuánta suerte tenemos en nuestras vidas.
Siempre que tenga mucho por lo que estar agradecido, aquí hay una simple oración de agradecimiento que decir.
Una oración cristiana de gratitud
Gracias, Señor, por las bendiciones que has otorgado a mi vida. Me has proporcionado más de lo que podría haber imaginado. Me has rodeado de gente que siempre me cuida. Me has dado familiares y amigos que me bendicen todos los días con palabras y acciones amables. Me levantan de maneras que mantienen mis ojos enfocados en ti y hacen que mi espíritu se eleve.
Además, gracias, Señor, por mantenerme a salvo. Me proteges de esas cosas que parecen atormentar a otros. Usted me ayuda a tomar mejores decisiones y me proporciona asesores para ayudarme con las decisiones difíciles de la vida. Me hablas de tantas maneras que siempre sé que estás aquí.
Y Señor, estoy muy agradecido por mantener a los que me rodean seguros y amados. Espero que me brindes la capacidad y el sentido para mostrarles cada día cuánto importan. Espero que me des la capacidad de darles la misma amabilidad que me han brindado.
Estoy extremadamente agradecido por todas tus bendiciones en mi vida, Señor. Rezo para que me recuerdes cuán bendecida soy y que nunca me permitas olvidar mostrar mi gratitud en la oración y los actos de bondad devueltos.
Gracias Señor.
En tu nombre, Amén.
Expresando gratitud con los versículos de la Biblia
La Biblia está llena de pasajes que puedes incorporar a tus oraciones de gratitud. Aquí hay algunos para elegir:
¡Eres mi Dios, y te alabaré! ¡Eres mi Dios, y te exaltaré! ¡Dale gracias al Señor, porque él es bueno! Su amor fiel perdura para siempre. (Salmo 118: 28-29, NTV)
Alégrate siempre, reza continuamente, da gracias en todas las circunstancias; porque esta es la voluntad de Dios para ti en Cristo Jesús. (1 Tesalonicenses 5:18, NVI)
Por lo tanto, dado que estamos recibiendo un reino que no puede ser sacudido, demos gracias y adoremos a Dios aceptablemente con reverencia y temor ... (Hebreos 12:28, NVI)
Por todo esto, Su Excelencia, le estamos muy agradecidos. (Hechos 24: 3, NTV)